El presidente Torre Tagle, del Bajo Perú, sufrió muchas derrotas, motivo por el cual desconocieron se autoridad y llamaron a Bolívar cargo de la Guerra de la independencia en este sector.
Bolívar vino al Perú con algunos batallones colombianos y con la ayuda de algunos generales peruanos, reunió más de diez mil soldados.
El congreso le dio el titulo de dictador.
Listas las tropas patriotas, Bolívar salió al encuentro del general Canterac, cuyo ejercito estaba compuesto por ocho mil hombres de infantería y la unidad de Caballería tenía mil doscientos soldados. Ambos ejércitos se encontraron en las áridas llanuras de Junín el 6 de agosto de 1824. El combate duró tres cuartos de hora y la lucha se desarrolló a lanza y sable.
Antonio José de Sucre
Después de media hora de combate, los patriotas estaban perdiendo, los colombianos huían en derrota, de repente el general argentino Necochea, por la parte este, atacó con sus escuadrones de reserva y los derrotó completamente.
Los realistas perdieron más de trescientos cincuenta hombres entre muertos y heridos, setenta prisioneros; los patriotas perdieron sólo setenta entre muertos y heridos.
Después de esta victoria que abrió el dintel de la Independencia, el Libertador Bolívar dejo el mando al general José Antonio de Sucre, quien persiguió a las fuerzas realistas hasta alcanzarlas en Condorcunca, donde consiguió la brillante victoria que selló la libertad del alto Perú. Esta fue la memorable “Batalla de Ayacucho”.