reformas sin alterar las tradiciones, preservando el legado del pasado a la vez que lo realzaba. En una parte poco conocida de su último discurso presidencial, explico la trascendental incorporación de las mayorías a los procesos políticos: “Las masas populares, excluidas de toda representación, objeto del desprecio de los gobiernos y siempre victimas en todos los cambios políticos, han hecho oír su voz y desempeñado su rol [sic] espontáneamente: han sofocado revoluciones y combatido por el gobierno constitucional. La aparición de este poder formidable es un hecho social de eminente trascendencia”.

Además, como ha demostrado el investigador Ramiro Duchen Condarco, el gobierno de Belzu presto atención a la educación y busco extenderla a los sectores populares. Refrendando este interés, el presidente saliente recomendó a los legisladores de 1855, que superen prejuicios y sigan su ejemplo: “Borrad de vuestra mente la idea antisocial de que le bajo pueblo no es susceptible de civilización y que no debe tomar parte en los negocios públicos. Educadlos e instruidlo; mejorad su condición, dadle lugar en la participación de vuestros derechos, el lugar compatible con los progresos de la época, proporcionadle garantías, trabajo y subsistencia…”.

Esta preocupación por la educación, que se tradujo en la creación de escuelas y el apoyo a una formación técnica, junto al afán por consolidar un democracia popular y defender la producción boliviana, son una muestra de que Belzu tuvo un proyecto serio. Además en sus ejecuciones apoyo mayoritario fue crucial. La combinación de un programa coherente, la identificación popular con el gobierno que no estuvo libre de oscilaciones, y la capacidad política del Presidente, permitieron un cambio respecto a épocas previas. Probablemente, lo mas importante de dicha transformación fue que las mayorías irrumpieron en la historia republican, manifestando sus demandas y apoyando un proyecto que respondía a ellas, y logrando, al menos durante un tiempo, neutralizar los embate de la élite en su contra.